La visita del presidente Javier Milei a Mar del Plata generó una jornada de alta tensión en la ciudad balnearia. Mientras el mandatario se preparaba para realizar una caminata de campaña por el centro, un numeroso grupo de manifestantes se concentró sobre la calle Güemes para expresar su repudio.
La movilización, similar a otras que se registraron en distintas provincias durante las últimas semanas, reunió a ciudadanos que cuestionaron las políticas del Gobierno y mostraron su descontento con pancartas, cánticos y consignas alusivas a presuntas irregularidades en el entorno presidencial. Entre ellas, se escucharon críticas hacia Karina Milei, secretaria general de la Presidencia, a quien acusan de recibir beneficios indebidos.
El recorrido de Milei forma parte de una estrategia para respaldar a los candidatos a diputados nacionales Diego Santilli y Karen Reinhardt, en el marco de una gira proselitista que busca fortalecer el apoyo a su espacio político de cara a las próximas elecciones legislativas.
Ante la creciente presencia de manifestantes y la posibilidad de enfrentamientos, las fuerzas federales desplegaron un importante operativo de seguridad que incluyó efectivos de la Policía Federal, la Gendarmería Nacional y la Prefectura Naval.
A pesar del clima tenso, el presidente mantuvo su agenda, aunque con un seguimiento estrecho por parte de las autoridades locales y la mirada atenta de vecinos y turistas que presenciaron una de las visitas más controvertidas de su gestión.
